Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer

Realizada en Beijing en 1995 marca un punto de inflexión para la Agenda Mundial de igualdad de género y de los derechos humanos de las mujeres.

Generalizó el concepto de género, la transversalidad y la incorporación de la perspectiva de género en el análisis de la situación y condición de las mujeres en los distintos ámbitos de la sociedad.

Se establecieron objetivos estratégicos y medidas para el logro de la igualdad en 12 esferas: pobreza, educación, salud, violencia, conflictos armados, economía, de adopción de decisiones, mecanismos institucionales, derechos humanos, medios de difusión y desigualdad de acceso y participación en los sistemas de comunicación, medio ambiente y la niña.

A 25 años de la Declaración, si bien se han realizado progresos significativos en el reconocimiento de los derechos y la autonomía de las mujeres y en la reducción de las desigualdades de género en América Latina y el Caribe, los avances han sido lentos y disímiles considerando que “La Estrategia de Montevideo para la Implementación de la Agenda Regional de Género en el Marco del Desarrollo Sostenible hacia 2030” es la herramienta regional idónea para acelerar su implementación.